martes, 28 de junio de 2016

Un reencuentro esperado, dado por el Espíritu Santo”



Claro está que las despedidas de los amigos no son para siempre, y que en algún momento de nuestras vidas nos hemos de volver a encontrar y que ese reencuentro causará alegría para para para cada uno de los involucrados; tal y como sucedió el domingo 19 de junio en la Parroquia de San José de Jalostotitlán, pues se efectuó un reencuentro (que se había prometido pero sin fecha clara) entre los fieles de esta comunidad y su Obispo Emérito Don Felipe Salazar.
El motivo principal de este reencuentro fue la confirmación de más de  120 jóvenes quienes, desde hace tres años se han estado preparando para recibir, en su plenitud, los dones del Espíritu Santo a través del ministerio del Obispo Emérito.
Don Felipe Salazar desde un inicio se mostró muy contento por volver a esta comunidad parroquial, pues en su homilía expresó que las personas que conforman la parroquia de San José siempre se han distinguido por su hospitalidad y derroche de cariño que tiene hacía sus pastores; resaltó que esos gestos ayudan al sacerdote a desenvolverse con mayor seguridad entre su comunidad. De igual manera resaltó las funciones de un Obispo Emérito y recalcó que, ahora, él tendrá más tiempo para pedir por todos los que conforman la Iglesia y las necesidades que ésta tenga. Por otra parte también hizo llegar el mensaje que Mons. Jorge Alberto Cavazos enviaba a toda la comunidad, en especial a los padres de familia (pues como recordamos en México se celebra el 3er domingo de junio) el cual se citan algunos fragmentos de la siguiente manera:   
“Quiero agradecer a ustedes papás, su ternura; responsabilidad; educación; desvelos; preocupaciones; cansancios… Gracias es una palabra que tal vez escuchan poco de sus hijos, pero que en el corazón de aquellos que llevamos su sangre, siempre está el reconocimiento de un amor especial… Nunca podremos olvidar sus consejos, sus esfuerzos, que son palabra de esperanza hecha vida…  
Gracias por sus palabras de sabiduría, que nos hace salir resistir y salir adelante en las batallas de la vida… por eso y tantas cosas ¡Felicidades!”
Finalizando la lectura del mensaje conmemorativo del pastor diocesano, la asamblea rompió el silencio con un emotivo aplauso que fue encabezado por Mons. Salazar en agradecimiento a los padres de familia y a la misiva recibida.
Durante el momento cumbre de las Confirmaciones, se podía ver el rostro de felicidad de cada uno de los confirmandos, pues el momento especial que habían estado esperando por mucho tiempo, había llegado y que al recibir los dones del Espíritu Santo confirmarían, libremente, su fe y amor a Cristo Jesús; pero también aceptaron el compromiso de llevar la palabra de Dios a todos los hermanos que no la conocen y seguir preparándose para dar un fiel testimonio de su palabra y amor incondicional.

Finalmente, y dada la bendición, Don Felipe felicitó a los jóvenes recién confirmados y optó por tomarse la tradicional foto del recuerdo, gesto que demostró la cercanía de quien se ha convertido en “el abuelo de la diócesis”. 
Por: Héctor Javier Álvarez Romero, corresponsal.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Agradecemos tus comentarios
(Los comentarios son moderados)